La OMS recomienda un consumo medio de unos 25g de azúcares “añadidos” al día, es decir, no incluye los azúcares que están de forma natural en alimentos como la fruta y la verdura; ahora bien, según datos del 2014, el consumo diario en nuestro país es de unos 94g.
¿Tantos dulces tomamos?
Hay que tener en cuenta que el azúcar añadido que tomamos no es sólo el que ponemos a los cafés, a las infusiones o a los yogures; gran parte está diluido en galletas, cereales, refrescos, zumos, helados, postres lácteos, repostería, etc. De modo que el total de azúcar que se acaba ingiriendo es mucho mayor del deseado.
Tengamos en cuenta que un terrón tiene entre 4 y 6 gramos de azúcar, pero una sola lata de refresco de cola puede llegar a tener 35 gramos, 10 gramos más de lo recomendado por la OMS.
Y por si fuera poco, el azúcar también se esconde en alimentos salados que uno no adivinaría nunca y que consumimos diariamente: el tomate frito, las salsas para ensaladas, el pan de molde, la pizza congelada, los platos pre-cocinados…
¿Soluciones? ¡Claro que las hay! Leer bien las etiquetas, saber elegir, moderarse con las cantidades y aprender a encontrar el placer dulce en los azúcares naturales que obtenemos de las frutas. ¡Son mucho más saludables!
Recordemos que los expertos advierten que el consumo “excesivo de azúcar” es perjudicial y es una de las causas por la que un 54% de la población española sufre de sobrepeso. Una cifra que en el caso de los niños se aproxima al 43%.